The Last of Us, final de temporada:

Busca la luz, el último capítulo de la primera temporada de la serie The Last of Us se emitió mientras se celebraba la entrega de los Premios Oscars 2023. Pero poco nos importaron los máximos galardones de la pantalla grande, lo que realmente queríamos ver era el desenlace de esta fantástica historia postapocalíptica, en un cierre que tuvo secretos, revelaciones y un generoso mar de cadáveres. ¡Lo que a la gente de bien nos gusta!

¿Joel se volvió loco? La actriz que encarna a la entrañable Ellie, Bella Ramsay, aseguró hace pocas semanas que el final iba a dividir a la gente. Una grieta inevitable dada la seguidilla de decisiones que toma Joel enceguecido por el cuidado de Ellie, su hija del corazón. Así es, nos ponemos espirituales y algo cursis, pero el vínculo entre ellos dos creció tanto y de forma tan escalonada que es imposible no establecer esa relación de padre e hija. Lo primero es la familia, sino preguntenselo a Pedrito Pascal.

¿Qué sucedió al final con la cura del Cordyceps, esa que iba a salvar a la humanidad y devolver a la vida a cientos de miles de infectados? ¿Joel y Ellie lograron llegar a algún laboratorio de Las Luciérnagas? Todo eso y más te contamos acerca del final de The Last of Us, la serie de HBO creada por Neil Druckmann y Craig Mazin que disfrutamos en VTR+, y que rompió con todos los récords de audiencia de la cadena. ¡Su primera temporada fue brutal y apasionante!

Antes, te recordamos que puedes leer nuestras reviews anteriores de los episodios 1×01, 1×02, 1×03, 1×04, 1×05 y 1×06, 1×07 y 1×08 de The Last of Us. ¡Queremos ya la segunda temporada!

Lazos familiares

El episodio empieza con una mujer embarazada corriendo en medio del bosque, aparentemente a punto de parir. Es que tiene una panza del tamaño del estadio de Colo-Colo. De fondo, se oyen infectados. La están cazando. Por suerte, encuentra una granja abandonada en medio del campo.

Rápidamente, la mujer entra y se da cuenta que está rompiendo bolsa. La guagua va a nacer en los próximos minutos. Sube la escalera, entra a un cuarto y traba la puerta con una silla. Se coloca contra la pared opuesta y saca su cuchillo. Los ruidos se incrementan y se escucha como golpean la puerta con vehemencia. No es el mejor lugar para tener un parto.

Una infectada entra al cuarto con el único objetivo de despedazar a esa humana. En el medio del ataque, la mujer le clava unas buenas cuchilladas en el cuello y derriba al infectado. Se oye el llanto de un bebé. Ella la mira, enamorada, mientras se da cuenta que fue mordida y su destino ya está marcado. Pero no así el futuro de la bebé, a la que decide llamar Ellie. ¡Oh my God!

Marlene (Merle Dandridge), de Las Luciérnagas, llega poco tiempo después con un equipo a la granja y encuentra a la mujer, que se llama Anna, lista para quitarse la vida antes de convertirse en un monstruo. Anna, interpretada por Ashley Johnson, la actriz que puso la voz y el rostro para Ellie en el videojuego de Naughty Dog, le pide por favor que se lleve a Ellie, la cuide y le de su cuchillo cuando sea más grande. Y finalmente, que la mate a ella y no la deje transformarse. Memento mori de excelencia televisiva.

La cura, más cerca que nunca

Como toda historia de aventuras, cuando el camino está llegando a su fin, las dudas y preguntas emergen una detrás de la otra. Joel y Ellie están llegando a Boston. Caminan por la autopista. Como intercambiando roles, Joel es quien está de buen humor y habla todo el tiempo, mientras Ellie está cabizbaja, conflictuada, como perdida en su propia cabeza. Quién lo diría.

Joel se abre como nunca lo hizo antes. Y le cuenta que intentó suicidarse cuando mataron a su hija Sarah veinte años atrás. La pesadez desaparece y Joel se muestra frágil, tierno (¡aww!). Premeditado o no, tira la caña de pescar y le pregunta a Ellie si quiere seguir con esto, que pueden volver a Jackson, el pueblo donde vive su hermano Tommy (Gabriel Luna). Sin embargo, Ellie ya tomó la decisión mucho tiempo atrás. Quiere llegar hasta el final y ayudar a los seres humanos.

El cierre perfecto de esta primera mitad del episodio se da calcado con el juego, cuando Ellie ve a una jirafa y posteriormente a una manada completa de este exótico animal. Juntos la alimentan y disfrutan de un momento inolvidable. La pausa que antecede la tormenta.

Tiros, tiros y más tiros

Mientras Joel y Ellie buscan el laboratorio, un grupo de Las Luciérnagas los intercepta y noquean a Joel con un culatazo en la nuca. Éste despierta al rato, en un cuarto de hospital, y pregunta por Ellie. Marlene le dice que la están preparando para cirugía, que la única manera de obtener una cura es sacrificando a Ellie, ya que el Cordyceps crece desde el cerebro. A Joel, naturalmente, esto no le perece nada bien.

La líder de Las Luciérnagas se apiada de él y le pide a dos de sus soldados que escolten a Joel a la autopista con un cuchillo y su mochila, y lo dejen libre. Primer error. Cuando comienzan a bajar por unas escaleras, Joel se despacha a ambos soldados en cuestión de segundos. Y comienza el rescate. Entre Joel y Liam Neeson en Búsqueda Implacable (2008), no sabemos quién da más miedo.

A través de pasillos, cuartos y salas de estar, Joel se abre paso a los tiros. No le tiembla el pulso para disparar a la cabeza de nadie. El objetivo es recuperar a la niña. Y así se sucede el tiroteo, en una secuencia entre el slow motion y la cara de piedra de Joel. Una vez en el quirófano, Joel le mete una bala en la cabeza al cirujano, y se lleva a Ellie. Por último, se cruza con Marlene, a quién tampoco duda en matar. ¡Es una máquina total!

¿Vacaciones morales?

Lo dijimos anteriormente: en este mundo siniestro no hay lugar para la moral. Desde ningún bando. El problema aquí, por lo que Bella Ramsey asegura que el público se va a dividir tras el episodio, es la magnitud de la decisión de Joel.

Por un lado, al enterarse de que Ellie no iba a salir viva de la operación, actúa como un padre que defiende a su hija y la salva, a pesar de prescindir de la posibilidad única de encontrar una cura. Por el otro, Las Luciérnagas tampoco le dan una opción a Ellie, y la sedan y la mandan al quirófano. De una u otra manera, Ellie no decide. No le dan ese derecho.

La polémica es total y devastadora. Y de ambos lados tienen argumentos a favor y en contra. Pero Ellie no se entera de nada de esto. Cuando se levanta, está en el asiento trasero de un auto, rumbo a Jackson. Joel le cuenta que unos saqueadores ingresaron al hospital y que por poco no pudo sacarla con vida de allí. Ellie duda, pero qué va a hacer.

La ética y la moral se mezclan en un final de episodio magnífico, a imagen y semejanza del galardonado videojuego. Muchas decisiones morales y personales tendrán repercusiones en el futuro. La falta del sacrificio por el bien mayor, que Ellie ni siquiera pudo considerar, y las inevitables consecuencias del egoísmo de Joel.
Así llegó al final la primera temporada de The Last of Us, con capítulos envolventes, hostiles, cargados de drama y acción. Una historia fascinante y emotiva que cumplió con todas las expectativas. Tendremos que esperar un buen tiempo para ver qué nos depara este dúo entrañable, y cómo avanza su historia. Aquí los estaremos esperando, más firmes que nunca. Soldados de Joel, por siempre.